La ley de la Armonía

  

Según la ley de la Armonía, energía en constante movimiento nos interconecta entre nosotros y con el flujo de eventos universal. Cuando estamos en armonía nos movemos dentro de una corriente de bendiciones y abundancia, pero cuando estamos fuera de la armonía salimos de esta corriente y nos quedamos a la orilla viendo las bendiciones pasar. Una resonancia en armonía comienza por uno mismo, luego vibra al exterior para conectarse a otro ser viviente.

La clave para armonizar con uno mismo es establecer un equilibrio en tus pensamientos, emociones y actos. Este tipo de equilibrio proviene de dos aparentemente intenciones opuestas: Tomar completa responsabilidad, y dejar ir el control.   La verdadera auto-responsabilidad significa estar 100% a cargo de tu calidad de vida. Estás a cargo de tus pensamientos y emociones al igual que todo lo que creas. Siempre estamos viviendo, creando y atrayendo.

La armonía en acción muestra un saludable respeto por ti mismo, tus seres queridos, tu carrera, y tus metas personales. Para crear la más alta resonancia armónica, debes ser completamente consciente de cómo empleas tu energía física y emocional. Pensamientos equilibrados son aquellos de calma, centrados, enfocados en la tarea del momento. Este estado mental comienza con la auto-aceptación moviéndose a través de la imparcialidad de la vida. Una de las mejores maneras de iniciar este proceso es bloqueando la auto-critica. ¡No puedes estar en armonía y sin amarte a la vez!

La manera que ves a los demás no puede ser diferente de cómo te ves a ti mismo, tienes que llegar al punto de igual aceptación para ti y para los demás, sin buscar su aprobación ni su negación. Cuando vemos a los demás con humanidad y consciencia nuestra empatía abre el flujo armónico, cuando percibes a los demás con compasión, cuanto te apartas de tus propias experiencias y te imaginas en las de ellos. Tu intención debe ser buscar unidad en vez de separación y reconocer similitudes en lugar de diferencias.

La opción de armonía es una opción de tranquilidad; lo que quiere decir paz en vez de conflicto, confianza en vez de miedo, y valores en vez de juicio.

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AFIRMACIONES

Tomo responsabilidad de mis pensamientos, emociones y actos

Tomo responsabilidad de mi calidad de vida.

Llevo una vida feliz y equilibrada.

Ahora escojo la armonía.

Me acepto a mí mismo y a los demás.

Me muevo en la corriente de bendiciones y abundancia ilimitada